sábado, noviembre 04, 2017

PADRE CORNELIO VAN DER SPEK


El P.Cornelio van der Spek. * 03-02-1901, + 02-02-1978.
Cornelio nació el 3 de febrero del año 1901 en el pueblo de Loosduinen, Holanda. Pasó varios años trabajando de agricultor y en el año de 1920 se presentó como vocación tardía en el seminario MSF de Kaatsheuvel, hizo sus votos religiosos el 8 de septiembre de 1827 y se ordenó sacerdote el 24 de julio de 1932.  Se hizo ecónomo en la casa del seminario mayor cuando aún era estudiante y en 1933 fue profesor de Liturgia.  Durante los siguientes años, según sus dichos, se sentía como “Maestro chasquilla”, ya que continuamente fue encargado de prestar servicios pastorales en forma  temporal en diferentes localidades. Mientras tanto no perdió su esperanza de ir a las misiones.
Por fin llegó en el año 1938 el momento ansiado.
 El P. Cornelio formó parte del primer grupo de misioneros nombrados para Chile y el 13 de octubre del mismo años se embarcó, con destino a la diócesis de Antofagasta, junto con los padres Antonio Hoogantink, Juan Visser y el hermano Wilibrordo,  siendo él mismo superior de la comunidad. El mismo escribió: “Cuando me embarqué en el puerto de Ámberes no sabía absolutamente nada sobre la realidad y las circunstancias que íbamos a encontrar en Chile”. En realidad fue para él el inicio de un tiempo de ser pionero, cuando llegó a ser superior y párroco en la parroquia de Taltal. Obtuvo muchos méritos por el establecimiento de la provincia chilena y de sus actividades misioneras. En los primeros veinte años de su permanencia en Chile siempre estuvo vinculado directamente con la dirección de la Comunidad. Cuando Chile llegó a ser Región, se convirtió en asistente del superior hasta que él mismo fue nombrado como superior regional, puesto en el cual permaneció hasta 1957. En todo este lapso de tiempo estuvo sumamente ocupado  con la reparación y construcción de templos y casas de residencia del clero. Siendo superior regional construyó la casa central en Santiago, sede de la dirección provincial. Toda esta labor estaba en buenas manos con él, porque era un hombre activo y emprendedor.
Después de los años en que cumplía funciones de superior, lo encontramos como párroco en Santa Rosa de Lima y más tarde en Coquimbo. Sobre todo, en esta última localidad perdió su corazón. Una vez mayor de edad tuvo que dejar en otras manos la función de párroco, pero mantuvo su residencia en el mismo lugar y siguió prestando servicios en muchas áreas. Por ningún motivo quiso abandonar este lugar y en sus últimas vacaciones en su patria el año 1976 su temor más grande fue  que el médico iba a decirle que no debió volver a su misión. Por eso con cautela evitó de encontrarse con él, y medio enfermo y, sin embargo, con mucho entusiasmo partió otra vez a Chile.

Pero no le quedaron muchos años de vida. Dos años más tarde, en 1978,. viajó de Coquimbo a Santiago para someterse a unos exámenes médicos. Fue hospitalizado el 18 de enero del mismo año El resultado de los exámenes no fue favorable. Aparentemente ya no se podía hacer nada para él y lo dieron de alta y se quedó en la casa central en 1 de febrero. El día siguiente fue el día de su Partida de este mundo…                                                                                                                                   Después de una celebración de exequias en Santiago fue trasladado a Coquimbo donde el 4 de febrero fue sepultado en medio de la gente, para quienes había trabajado muchos años, primero como párroco y después como sacerdote emérito, pero siempre como sacerdote muy activo.                                                          Allí muchos lo recordarán con gratitud por lo que hizo para su Iglesia y para su gente.                                                                                                            .                                                                                  (Fuente: archivos de Holanda. Trad. Gaspar.)




 
 Padre Cornelio van der Spek fue párroco de la parroquia San Luis de Coquimbo de 1963 a 1971.