sábado, octubre 28, 2017

PADRE GUILLERMO APPELS



Guillermo Appels. 


Guillermo poseía el talento de una inteligencia superior. En el seminario menor se destacaba siempre como el mejor alumno del curso. Parece que no le costó esforzarse para esto. Si hubiera sido difícil para él, nunca habría llegado tan lejos en la vida.  Nunca tuvo una salud firme, sino frágil y quebrantada. Quizás por eso dio la impresión de proceder con lentitud y buscando un camino fácil. 
 (PADRE GUILLERMO APPELS, ROBERTO HOLLAK Y ADRIANO DE MEYER CANTANDO)

Fue vicario cooperador en la parroquia de “Buen Consejo”, párroco en Tocopilla y Coquimbo, incluso superior regional, cuando solo hace relativamente poco tiempo había llegado a Chile, pero empezó muy temprano a decaer en cuanto salud. Durante seis años pasaba de una enfermedad al otro y ha sufrido enormemente, hasta que falleció ya a la edad de 54 años. Después de cada período de enfermedad volvió a estar activo, pero en el fondo su vida fue un calvario. Todo comenzó con un desangramiento cerebral que afectó su facultad de hablar y su memoria. Después de su recuperación se trasladó a Valparaíso, donde su hermana de nombre Jet, hermana Wilibrorda, religiosa pasionista, con el fin de aprender, con la ayuda suya, a hablar y escribir de nuevo. Después adquirió gangreno y arterioesclerosis en grado alto, dos veces un infarto de corazón y en los últimos meses aún una pulmonía después de otra encefalitis.

Siempre se conformaba con sus enfermedades y debilidad y trataba de luchar en contra de ellas. En el año 1965 fue de vacaciones a Holanda, pero no pensaba quedarse allí.  Regresó a Chile con tan buen ánimo que incluso aceptó un nombramiento para Antofagasta a desempeñarse como capellán de una casa de ancianos. Era un hombre bueno y servicial para sus feligreses, se sentía muy vinculado con sus hermanos de la congregación y tenía un gran espíritu de compañerismo, disfrutaba mucho estar en compañía con otros y como hombre de sufrimientos probablemente ha podido lograr para Chile más por su fe que por sus actividades.                              (Trad. Gaspar)