El reto de formar a los futuros sacerdotes cuando son

 nativos digitales

La así llamada «revolución digital» ha supuesto una

 «revolución antropológica»

Esa revolución antropológica, que es consecuencia de

la permeabilidad de internet en la vida humana, tiene

 implicaciones en ámbitos muy concretos de la vida de

 la Iglesia como lo son la promoción vocacional y la

 formación de sus futuros ministros.

Por medio del internet el seminarista busca completar su

 formación intelectual y espiritual como una verdadera

 respuesta a sus inquietudes vocacionales



 El riesgo de afrontar deficientemente el encuentro con

 lo digital en los seminarios puede individuarse en el

 mero trasladar las impresiones personales de la

 autoridad de turno y no, como sería de esperar, en

 el resultado reflexivo que involucra a otros para

 entender en profundidad las implicaciones de la

 revolución digital en las vidas concretas de las

 personas que se preparan para ser sacerdotes.

El reto de formar a los futuros sacerdotes de la Iglesia al

 tiempo de las redes sociales pasa entonces también por

 una adecuada comprensión del ambiente digital.