martes, mayo 28, 2013

LA VIDA DESPUÉS DE APARECIDA



Hay que vivir Dios en la vida cotidiana y  bajarlo de las nubes a nuestra vida: “No se trata de ir  la casa de Dios como un lugar determinado y exclusivo de su presencia, sino de hacer de cada mesa un altar y de cada casa un templo. Que cada uno de nuestros hogares sea una verdadera casa de Dios, iglesia doméstica 

La catequesis familiar enseña a los padres de educar y formar a sus hijos en la fe católica.Los padres deben asumir esta responsabilidad.
Los ministros extraordinarios de la eucaristía hacen una liturgia domestica y dan la comunión a los enfermos.
También hacen la liturgia dominical sin sacerdotes 
Los fieles se ofrecen como lectores para anunciar la palabra de Dios en la asamblea